INTRODUCCIÓN

Las estructuras de hormigón pueden fallar por diversas razones durante su vida útil. Las razones más comunes son la contracción de la rigidez, la expansión térmica, la tensión de carga y la fluencia. Las grietas son comunes y las grietas no necesariamente significan daño estructural, pero por razones estéticas o psicológicas, los usuarios no esperan grietas. Además, las grietas ayudan a reducir la resistencia. Las grietas muy pequeñas permiten la penetración de oxígeno, agua, cloruros u otros agentes agresivos que contribuyen a la corrosión de la armadura y por tanto a la resistencia, capacidad de carga y capacidad de carga de la estructura en hormigón sin que ésta pueda resistir, reducen la vida útil.

Muy pocos edificios pueden sobrevivir al paso del tiempo sin sufrir daños. Hay ruinas de Egipto, Mesoamérica u otras civilizaciones, pero se necesita una perspectiva histórica para ver cómo se vería un rascacielos, 2000 o 3000 años después. Ahora, ¿puede imaginar una estructura de edificio libre de mantenimiento u otra infraestructura para repararse? Por tanto, ese plazo está garantizado.

En la Universidad Tecnológica de Delft se ha investigado el uso de bacterias en el hormigón, a fin de incrementar la capacidad de reparación mediante el uso de precipitación microbiana inducida. Este método se basa en la precipitación localizada de carbonatos de calcio inducida
por actividad bacteriana. 

Ilustración
Fuente:https://blog.structuralia.com/hs-fs/hubfs/Imported_Blog_Media/Hormigon2-5.jpg?width=600&height=300&name=Hormigon2-5.jpg


Fuente:https://www.coursehero.com/file/66198605/biocementopdf/





Comentarios

Entradas populares de este blog

FUTURO DE HORMIGÓN AUTORREPARABLE EN LA CONSTRUCCIÓN